Queremos compartir con ustedes la 3º parte de un articulo exclusivo para Laboratorio Proyar, redactado por el Dr. Jorge Alonso. Médico, MN 67.640, Director del posgrado de Fitomedicina de la U.B.A. y Presidente de la Sociedad Latinoamericana de Fitomedicina.
Celulitis (Parte 3) Ver segunda parte
Localización
La celulitis es un fenómeno que tanto puede afectar a mujeres (90% de los casos) como a hombres (10%). En base a que la fisiología del cuerpo femenino y masculino y la distribución de la grasa corporal en un sexo u otro es diferente, también lo será la localización de la celulitis.
Tipo androide (típica del varón): Localiza en las partes más altas del cuerpo y abdomen.
Tipo ginoide (típica de la mujer): Las zonas más afectadas corresponden a la parte inferior del cuerpo, es decir, caderas, muslos y glúteos. Este tipo de celulitis es la más frecuente y se conoce popularmente como “pantalón de montar”. Con menor frecuencia la celulitis puede afectar a tobillos, pantorrilla y rodillas, conociéndose esta localización con el nombre de “pierna de bota”, desarrollándose de modo paralelo a la deformación en “pantalón de montar”.
Otras: Existen localizaciones en zonas muy precisas como ser la región cervical (denominada “cuello de bisonte”) que a menudo está asociada a artrosis cervical, pudiendo ser causal de cefaleas. También existe la de la región lumbar, que se presenta como un profundo canal dispuesto a lo largo de la columna vertebral.
Clasificación
Hay diferentes criterios para clasificar la celulitis. En función de las características histopatológicas y clínicas el proceso celulítico puede clasificarse en cuatro grados:
Grado I. Casi asintomática desde lo clínico. Se observa un incremento de la permeabilidad capilar (los pequeños vasos se dilatan), desigualdad en los adipocitos y microhemorragias. Al comprimir la piel no se observa aún.
Grado II. Igual al grado I, salvo que si bien no hay alteraciones en el relieve cutáneo, la celulitis ya es observable tras la compresión de la piel.
Grado III. A simple vista se visualiza la piel empedrada (piel de naranja) con dolor a la palpación manual.
Grado IV. A diferencia del grado III, aquí los nódulos son mucho más visibles, palpables y dolorosos, estando adheridos a niveles profundos. Cursa con alteraciones importantes de la microcirculación.
Continuará en cuarta entrega.